CURSO SUPERIOR TRIENAL – S.A.C.P.E.R.
UN LUGAR DE FORMACIÓN Y CAPACITACIÓN
Dr. Victor Nacif Cabrera
Ex Jefe Departamento de Cirugía Plástica y Quemados del Hosp. de Quemados (GCABA).
Profesor Consulto del Curso Superior de Especialización de la SACPER –Escuela de Postgrado de la Asociación Médica Argentina (AMA).
Ex Presidente de la SACPER (1979-1980)
Miembro de Honor de A.M.A.
El Curso Superior de Especialización en Cirugía Plástica de la S.A.C.P.E.R. cumple este 1º de Julio, treinta y dos años ininterrumpidos de existencia. A través de este tiempo se ha ido consolidando; y desde el año 1995, el Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología y el Ministerio de Salud Pública de la Nación le otorgaron reconocimiento oficial y validez nacional a su certificado.
La fecha de creación, condiciones de ingreso de los postulantes, materias que lo constituyen, duración del mismo, etc., son datos que se encuentran muy bien detallados en la publicación que realizaron el Director del mismo, el Dr. Ricardo J. Losardo y su Secretario, el Dr. Andrés Dimópulos en la Revista Argentina de Cirugía Plástica.
Por lo que en este relato me orientaré hacia el aprendizaje -objeto de este Curso Superior-, señalando algunos hechos que considero relevantes en la educación de los cirujanos jóvenes, con las limitaciones de espacio que este artículo requiere.
La oficialización de la docencia en Cirugía Plástica
Tataré de seguir un orden cronológico en esta reseña. Los primeros esfuerzos de oficialización de la docencia en la especialidad se realizaron en E.E.U.U. al crearse, a instancias de Blair en el año 1937, el American Board of Plastic que valora mediante examen oral y escrito a los candidatos que posean certificados otorgados por Servicios Universitarios o Estatales, allí se establecen las bases científicas de la especialidad, métodos de enseñanza y evaluación, como así también los conceptos éticos de la cirugía plástica.
En Europa, la U.E.M.S. (Unión Europea de Médicos Especialistas) en 1969, reconoce a la cirugía plástica como especialidad independiente.
En la Argentina, en el año 1974, en la Universidad del Salvador, se crea la Carrera de Especialista en Cirugía Plástica, la primera del país, dirigida por el Profesor Dr. Héctor Marino.
La S.A.C.P.E.R. como institución rectora en nuestro país no podía dejar de tener dentro de su seno, un lugar de capacitación de los jóvenes cirujanos que fueran surgiendo. Es así que en el año 1977, por iniciativa del Profesor Dr. Néstor O. Maquieira -quien ejercía la presidencia de la misma- se creó el Curso Trienal de Especialización en Cirugía Plástica, constituyéndose en la segunda institución formadora de cirujanos plásticos del país.
Siguiendo el orden cronológico, en referencia a los ámbitos de enseñanza oficializados, debemos mencionar las Unidades Académicas de la Carrera de Médico Especialista en Cirugía Plástica creadas por Resolución del Consejo Directivo de la Facultad de Medicina y aprobada por Resolución 5.307 / 90 del Consejo Superior de la Universidad de Buenos Aires.
Los primeros años del Curso Superior Trienal
Se designó Presidente de Honor del Curso al Cirujano Maestro Dr. Ernesto Malbec (quien ocupó el cargo hasta su fallecimiento, en 1991) y un Comité de Docencia integrado por los Dres. Paulino Morales, Pedro Sarquissian, Martín Saubidet y José Spera. Al siguiente año, 1978, se nombró entonces como primer Director al Dr. Paulino Morales, quien permaneció en dicho cargo hasta 1999, para luego ejercer la Presidencia de la SACPER.
En 1979, como Presidente de la S.A.C.P.E.R. y concomitantemente de la Sociedad de Cirugía Plástica de Buenos Aires (recientemente creada como filial de la anterior) y a pesar de las numerosas funciones que ambas Sociedades me exigían, junto a los integrantes de la Comisión Directiva, le brindamos al joven Curso nuestro total apoyo y encontramos en el mismo, un lugar donde desarrollar nuestra vocación docente. En ese entonces, la materia Cirugía Plástica de las Quemaduras estaba a cargo del Dr. Carlos Otero. Eran épocas fundacionales en la Cirugía Plástica Argentina.
Los pilares de la docencia
El acto de enseñar y capacitar no es más que la suma de transmitir conocimientos, desarrollo y aprendizaje, cuyo fin lleva a que el individuo modifique su comportamiento, proceso continuo que lo debe acompañar toda su vida.
Desde el inicio de mi carrera en Cirugía General tuve maestros que me impulsaron a la docencia. Así en el año 1972, siendo miembro de la Asociación Argentina de Cirugía, tuve oportunidad de asistir al 43º Congreso de la misma, donde la “Educación Médica” fue tema central, tratado exhaustivamente por los Dres. Jorge Berra, José Spátola y Oscar Aguilar.
En el Hospital de Quemados, lugar donde desarrollábamos nuestras tareas, el Profesor Dr. Fortunato Benaim siendo Director, nos inculcó, nos dirigió y estimuló en nuestra formación asistencial, docente y de investigación. Imbuidos de esas enseñanzas las volcamos en el Curso Superior Trienal.
En el VII Congreso Argentino de Cirugía Plástica, realizado en Mar del Plata, en 1977, el Cirujano Maestro Profesor Dr. Héctor Marino en la conferencia central “El ideal en la formación del cirujano plástico” marca las pautas a tener en cuenta para la capacitación del profesional. Esta se halla publicada en la Revista de nuestra Sociedad. Entre otros conceptos señala “tratando un tema tan apasionante como es la formación de quienes han de sucedernos profesionalmente…” la importancia de la educación previa en cirugía general de los educandos y expresa un profundo deseo que sea éste el camino seguido por los que deban formar a nuestros futuros sucesores. Concepto definitivamente incorporado.
Recordando maestros de la cirugía plástica argentina no puedo dejar de mencionar al Dr.Julián Fernández. En la Revista de nuestra Sociedadpuede leerse su trabajo sobre la formación ideal del cirujano plástico. Allí, entre otros conceptos, se refiere a la vocación y señala “es un impulso íntimo y persistente hacia un fin deseado y deseable; es el arte de servir por servir, un sentimiento ajeno a toda recompensa; es necesaria la aptitud, cualidad que hace ejercitar un arte con presteza, con facilidad”. También menciona allí las cualidades que debe tener un maestro.
De esta manera, se destacan tres paradigmas en la formación docente, Héctor Marino, Julián Fernández y Fortunato Benaim, dos de ellos llegaron a ser miembros de número de la Academia Nacional de Medicina, órgano supremo de la medicina argentina.
La formación y capacitación en la especialidad
La SACPER a través de este Curso Superior impulsa la formación y capacitación de los jóvenes cirujanos que desean especializarse en la cirugía plástica y cumple con la tarea más noble del ser humano: transmitir conocimientos y experiencias de vida.
Para cerrar, algunos conceptos que considero que no pueden dejar de mencionarse: la cirugía plástica tiene obligaciones de medio, pero también siempre hay expectativas de un resultado satisfactorio, cuyas eventuales consecuencias legales justifican todo esfuerzo para refrendar oficialmente la idoneidad de quien la practica.
La cirugía plástica es una especialidad que se caracteriza por su autonomía y autoridad en la toma de decisiones, requiere destreza en la técnica y habilidad manual; y las mismas se acrecientan con la práctica permanente.
Hoy en día, la tecnología mediática hace que la información llegue más fácilmente a los educandos. Por supuesto, que en cirugía además del conocimiento científico intelectual nada va a reemplazar al quirófano en la práctica quirúrgica, es un arte que siempre va a depender de las cualidades y aptitudes personales.
No es casual que en este momento, en el que estoy terminando este escrito, me llegue a las manos el último número de la Revista de Cirugía Plástica ¡qué coincidencia!. En su editorial la Dra. Martha O. Mogliani con el título “¿Qué significa capacitarse?” hace mención al aprendizaje, el adiestramiento y la ejercitación y vierte conceptos muy bien expresados descarnadamente pero reales sobre la actualidad de la especialidad en la Argentina con los que estoy totalmente de acuerdo. Me parece muy original la idea de un “simulador quirúrgico” (con las limitaciones imaginables) que vendría, en cierta forma, a suplir las deficiencias en la enseñanza práctica limitada por las razones legales que todos conocemos.
Como vemos, los tiempos cambian y el desafío de todo Curso es mantenerse en la primera línea, renovando su espíritu pero conservando su esencia. El Curso Superior de Especialización en Cirugía Plástica de la SACPER, que he acompañado como docente desde su creación y a lo largo de toda mi vida, lo viene logrando con esmero y dedicación en estos 32 años de vida.
Bibliografía
[1]Losardo, Ricardo J.; Dimópulos, Andrés N.: “Curso Superior de Especialización en Cirugía Plástica S.A.C.P.E.R. 25 años de historia”, Revista Argentina de Cirugía Plástica, Vol XI nº 1, 44-47, 2005.
[2] Converse, J.M.: “The Twentieth Century. The period of Growth (1914-1939)”, Surgical Clinics of North America Reconstructive Plastic Surgery, 1067, 47 (2): 261-278.
[3] Marino, Héctor: “El ideal en la formación del cirujano plástico”, Cirugía Plástica Argentina, Vol. I nº 3, 186-188, 1977.
[4] Fernández, Julián: “La formación ideal del cirujano plástico”, Cirugía Plástica Argentina, Vol. II nº 1, 36-38, 1978.
[5] Mogliani, Martha O: “¿Qué significa capacitarse?, Revista Argentina de Cirugía Plástica, Vol. XV nº 1-12, 2009.
Dirección del autor:
French 2898- 4º A
(1425) Cap. Fed.
4826-7869
Publicado en la Revista Argentina de Cirugía Plástica - Vol. XV - Nº 3 - 2009 - pág. 133-134.
Ex Jefe Departamento de Cirugía Plástica y Quemados del Hosp. de Quemados (GCABA).
Profesor Consulto del Curso Superior de Especialización de la SACPER –Escuela de Postgrado de la Asociación Médica Argentina (AMA).
Ex Presidente de la SACPER (1979-1980)
Miembro de Honor de A.M.A.
El Curso Superior de Especialización en Cirugía Plástica de la S.A.C.P.E.R. cumple este 1º de Julio, treinta y dos años ininterrumpidos de existencia. A través de este tiempo se ha ido consolidando; y desde el año 1995, el Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología y el Ministerio de Salud Pública de la Nación le otorgaron reconocimiento oficial y validez nacional a su certificado.
La fecha de creación, condiciones de ingreso de los postulantes, materias que lo constituyen, duración del mismo, etc., son datos que se encuentran muy bien detallados en la publicación que realizaron el Director del mismo, el Dr. Ricardo J. Losardo y su Secretario, el Dr. Andrés Dimópulos en la Revista Argentina de Cirugía Plástica.
Por lo que en este relato me orientaré hacia el aprendizaje -objeto de este Curso Superior-, señalando algunos hechos que considero relevantes en la educación de los cirujanos jóvenes, con las limitaciones de espacio que este artículo requiere.
La oficialización de la docencia en Cirugía Plástica
Tataré de seguir un orden cronológico en esta reseña. Los primeros esfuerzos de oficialización de la docencia en la especialidad se realizaron en E.E.U.U. al crearse, a instancias de Blair en el año 1937, el American Board of Plastic que valora mediante examen oral y escrito a los candidatos que posean certificados otorgados por Servicios Universitarios o Estatales, allí se establecen las bases científicas de la especialidad, métodos de enseñanza y evaluación, como así también los conceptos éticos de la cirugía plástica.
En Europa, la U.E.M.S. (Unión Europea de Médicos Especialistas) en 1969, reconoce a la cirugía plástica como especialidad independiente.
En la Argentina, en el año 1974, en la Universidad del Salvador, se crea la Carrera de Especialista en Cirugía Plástica, la primera del país, dirigida por el Profesor Dr. Héctor Marino.
La S.A.C.P.E.R. como institución rectora en nuestro país no podía dejar de tener dentro de su seno, un lugar de capacitación de los jóvenes cirujanos que fueran surgiendo. Es así que en el año 1977, por iniciativa del Profesor Dr. Néstor O. Maquieira -quien ejercía la presidencia de la misma- se creó el Curso Trienal de Especialización en Cirugía Plástica, constituyéndose en la segunda institución formadora de cirujanos plásticos del país.
Siguiendo el orden cronológico, en referencia a los ámbitos de enseñanza oficializados, debemos mencionar las Unidades Académicas de la Carrera de Médico Especialista en Cirugía Plástica creadas por Resolución del Consejo Directivo de la Facultad de Medicina y aprobada por Resolución 5.307 / 90 del Consejo Superior de la Universidad de Buenos Aires.
Los primeros años del Curso Superior Trienal
Se designó Presidente de Honor del Curso al Cirujano Maestro Dr. Ernesto Malbec (quien ocupó el cargo hasta su fallecimiento, en 1991) y un Comité de Docencia integrado por los Dres. Paulino Morales, Pedro Sarquissian, Martín Saubidet y José Spera. Al siguiente año, 1978, se nombró entonces como primer Director al Dr. Paulino Morales, quien permaneció en dicho cargo hasta 1999, para luego ejercer la Presidencia de la SACPER.
En 1979, como Presidente de la S.A.C.P.E.R. y concomitantemente de la Sociedad de Cirugía Plástica de Buenos Aires (recientemente creada como filial de la anterior) y a pesar de las numerosas funciones que ambas Sociedades me exigían, junto a los integrantes de la Comisión Directiva, le brindamos al joven Curso nuestro total apoyo y encontramos en el mismo, un lugar donde desarrollar nuestra vocación docente. En ese entonces, la materia Cirugía Plástica de las Quemaduras estaba a cargo del Dr. Carlos Otero. Eran épocas fundacionales en la Cirugía Plástica Argentina.
Los pilares de la docencia
El acto de enseñar y capacitar no es más que la suma de transmitir conocimientos, desarrollo y aprendizaje, cuyo fin lleva a que el individuo modifique su comportamiento, proceso continuo que lo debe acompañar toda su vida.
Desde el inicio de mi carrera en Cirugía General tuve maestros que me impulsaron a la docencia. Así en el año 1972, siendo miembro de la Asociación Argentina de Cirugía, tuve oportunidad de asistir al 43º Congreso de la misma, donde la “Educación Médica” fue tema central, tratado exhaustivamente por los Dres. Jorge Berra, José Spátola y Oscar Aguilar.
En el Hospital de Quemados, lugar donde desarrollábamos nuestras tareas, el Profesor Dr. Fortunato Benaim siendo Director, nos inculcó, nos dirigió y estimuló en nuestra formación asistencial, docente y de investigación. Imbuidos de esas enseñanzas las volcamos en el Curso Superior Trienal.
En el VII Congreso Argentino de Cirugía Plástica, realizado en Mar del Plata, en 1977, el Cirujano Maestro Profesor Dr. Héctor Marino en la conferencia central “El ideal en la formación del cirujano plástico” marca las pautas a tener en cuenta para la capacitación del profesional. Esta se halla publicada en la Revista de nuestra Sociedad. Entre otros conceptos señala “tratando un tema tan apasionante como es la formación de quienes han de sucedernos profesionalmente…” la importancia de la educación previa en cirugía general de los educandos y expresa un profundo deseo que sea éste el camino seguido por los que deban formar a nuestros futuros sucesores. Concepto definitivamente incorporado.
Recordando maestros de la cirugía plástica argentina no puedo dejar de mencionar al Dr.Julián Fernández. En la Revista de nuestra Sociedadpuede leerse su trabajo sobre la formación ideal del cirujano plástico. Allí, entre otros conceptos, se refiere a la vocación y señala “es un impulso íntimo y persistente hacia un fin deseado y deseable; es el arte de servir por servir, un sentimiento ajeno a toda recompensa; es necesaria la aptitud, cualidad que hace ejercitar un arte con presteza, con facilidad”. También menciona allí las cualidades que debe tener un maestro.
De esta manera, se destacan tres paradigmas en la formación docente, Héctor Marino, Julián Fernández y Fortunato Benaim, dos de ellos llegaron a ser miembros de número de la Academia Nacional de Medicina, órgano supremo de la medicina argentina.
La formación y capacitación en la especialidad
La SACPER a través de este Curso Superior impulsa la formación y capacitación de los jóvenes cirujanos que desean especializarse en la cirugía plástica y cumple con la tarea más noble del ser humano: transmitir conocimientos y experiencias de vida.
Para cerrar, algunos conceptos que considero que no pueden dejar de mencionarse: la cirugía plástica tiene obligaciones de medio, pero también siempre hay expectativas de un resultado satisfactorio, cuyas eventuales consecuencias legales justifican todo esfuerzo para refrendar oficialmente la idoneidad de quien la practica.
La cirugía plástica es una especialidad que se caracteriza por su autonomía y autoridad en la toma de decisiones, requiere destreza en la técnica y habilidad manual; y las mismas se acrecientan con la práctica permanente.
Hoy en día, la tecnología mediática hace que la información llegue más fácilmente a los educandos. Por supuesto, que en cirugía además del conocimiento científico intelectual nada va a reemplazar al quirófano en la práctica quirúrgica, es un arte que siempre va a depender de las cualidades y aptitudes personales.
No es casual que en este momento, en el que estoy terminando este escrito, me llegue a las manos el último número de la Revista de Cirugía Plástica ¡qué coincidencia!. En su editorial la Dra. Martha O. Mogliani con el título “¿Qué significa capacitarse?” hace mención al aprendizaje, el adiestramiento y la ejercitación y vierte conceptos muy bien expresados descarnadamente pero reales sobre la actualidad de la especialidad en la Argentina con los que estoy totalmente de acuerdo. Me parece muy original la idea de un “simulador quirúrgico” (con las limitaciones imaginables) que vendría, en cierta forma, a suplir las deficiencias en la enseñanza práctica limitada por las razones legales que todos conocemos.
Como vemos, los tiempos cambian y el desafío de todo Curso es mantenerse en la primera línea, renovando su espíritu pero conservando su esencia. El Curso Superior de Especialización en Cirugía Plástica de la SACPER, que he acompañado como docente desde su creación y a lo largo de toda mi vida, lo viene logrando con esmero y dedicación en estos 32 años de vida.
Bibliografía
[1]Losardo, Ricardo J.; Dimópulos, Andrés N.: “Curso Superior de Especialización en Cirugía Plástica S.A.C.P.E.R. 25 años de historia”, Revista Argentina de Cirugía Plástica, Vol XI nº 1, 44-47, 2005.
[2] Converse, J.M.: “The Twentieth Century. The period of Growth (1914-1939)”, Surgical Clinics of North America Reconstructive Plastic Surgery, 1067, 47 (2): 261-278.
[3] Marino, Héctor: “El ideal en la formación del cirujano plástico”, Cirugía Plástica Argentina, Vol. I nº 3, 186-188, 1977.
[4] Fernández, Julián: “La formación ideal del cirujano plástico”, Cirugía Plástica Argentina, Vol. II nº 1, 36-38, 1978.
[5] Mogliani, Martha O: “¿Qué significa capacitarse?, Revista Argentina de Cirugía Plástica, Vol. XV nº 1-12, 2009.
Dirección del autor:
French 2898- 4º A
(1425) Cap. Fed.
4826-7869
Publicado en la Revista Argentina de Cirugía Plástica - Vol. XV - Nº 3 - 2009 - pág. 133-134.