MI FORMACIÓN EN EL CURSO SUPERIOR TRIENAL
EN CIRUGÍA PLÁSTICA: 1981-1984
Dr. Juan Carlos Tagliapietra
Promoción 1984 - Curso Superior de Especialización en Cirugía Plástica.
Miembro Titular de la Sociedad de Cirugía Plástica de Buenos Aires.
Médico Cirujano Plástico – Sanatorio San Lucas (San Isidro- Pcia. Bs. As. ).
Ante la iniciativa de narrar la historia del Curso Superior Trienal a través de sus egresados y con el fin de publicarlas en la Revista de la Sociedad Argentina de Cirugía Plástica, relato esta experiencia que me vinculara a un grupo de colegas que encontré en este Curso de la AMA, que constituyó un lugar de excelencia para formarme como especialista.
Los comienzos y una influencia fundamental.
Me recibí apenas a 10 días de cumplir 26 años, en la UBA, dando como última materia Urología en el Hospital de Clínicas, una linda materia para recibirse, por suerte fue casi un trámite. Al día siguiente, estaba haciendo mi primera guardia de médico general en una clínica de San Fernando, donde continué trabajando por casi 2 años más.
En Febrero del ´79, recibí mi titulo de médico, de manos del Prof. Dr. Alberto Houssay.
Aquí me permito retrotraerme a años anteriores a recibirme. En aquella época, existía todavía el “Practicantado”, actividad asistencial desarrollada por estudiantes de medicina después de haber aprobado Medicina I y II. Fue por el año ´76 que, a través de una médica ginecóloga amiga, me presenté a la guardia de los días lunes de la Asistencia Pública de San Isidro, un centro de emergencias con mucha actividad por entonces, fui presentado al cirujano Jefe de Guardia, que resultó ser nada más y nada menos que el Dr. José "Pepe" Robles que en esa época todavía alternaba la especialidad con la actividad hospitalaria. De más está decir que desde ahí en adelante mis pasos hacia la elección de la cirugía plástica como la especialidad que iba a desarrollar en el futuro fueron mucho más sencillos y seguros. Ya desde ese entonces, tuve el placer de asistirlo en las cirugías de urgencia durante las guardias y visitarlo con frecuencia en su quirófano los días en que operaba.
Con el claro objetivo de hacer la especialización en el Curso Trienal de la AMA, me presenté en el servicio de Cirugía General del Hospital de San Isidro cuyo jefe, en esa época era el Dr. Jorge Bodor, quien me aceptó para realizar los 2 años de concurrencia en cirugía general que el curso de especialización exigía como condición de ingreso en ese momento. Luego de finalizar el curso volví al hospital al sector de Cirugía Plástica junto a los Dres. Nahuel García Iturralde y Enrique Vitale permaneciendo durante varios años más, además de asociarnos en la práctica privada.
Comenzamos el Curso.
Ingresé al Curso en Julio del ´81 después de una evaluación de antecedentes de los postulantes. En esa época, el Director era el Dr. Paulino Morales y el Secretario el Dr. Guillermo Flaherty. Ingresaban cuatro postulantes por año y rotábamos dos por hospital intercambiando las rotaciones cada semestre.
Mi primera rotación fue en el Hospital de Quemados y mi compañero de entonces, cuyo nombre no recuerdo, dejó el curso dos o tres meses después de comenzarlo para dedicarse a la Psiquiatría. Desde entonces, mis compañeros de todas las mañanas fueron los alumnos de la Carrera de la Universidad del Salvador que hacían las mismas rotaciones, Tomás Brosto, con quien he mantenido una gran amistad durante todos estos años y el fallecido Carlos Novick. En la otra rotación, estaban José Soria y Jorge Rodríguez, con quien nos cruzábamos ocasionalmente y obviamente, al momento de rendir las evaluaciones finales de la rotación. Si mal no recuerdo en ese momento era el jefe de Servicio del Hospital de Quemados el Dr. Víctor Nacif Cabrera y como instructores recuerdo a los Dres. Hugo Bertone, María Corujo, Jorge Parcansky y Mario García Pintor.
En el primer semestre del ´82, comenzamos a rotar por el Hospital de Niños “Ricardo Gutiérrez”, cuyo jefe era el Dr. Oscar Mallo, allí me sentí muy bien guiado gracias a la presencia permanente de los Dres. Pedro Dogliotti y Susana Ruiz, quienes me enseñaron primero y me asistieron luego en diversas cirugías reconstructivas infantiles.
Ese invierno empezó el largo viaje de San Isidro a Lanús, con escala en Parque Chacabuco donde pasaba a buscar a Carlos Novick y seguíamos viaje hacia el Servicio del maestro Flavio Sturla, en el Hospital Aráoz Alfaro, donde casi siempre pasábamos unas horas en la morgue "disfrutando" de algún "Juanito" con una buenas medialunas para el desayuno e inolvidables enseñanzas en cirugía maxilo-facial, que recordamos de esos lejanos tiempos.
Luego fuimos a San Martín, al Hospital Mariano Castex (actual Eva Perón), a realizar la rotación de cirugía de mano y miembros, con el Dr. Néstor Maquieira, con quien tuvimos el placer de compartir horas de cirugía y ateneos. En esa época, si mal no recuerdo, Héctor Lanza era el Jefe de Residentes.
La rotación de cirugía oncológica la realizamos en el Hospital Fernández, cuyo jefe era el Dr. Héctor La Ruffa. El Fernández fue mi Unidad Hospitalaria así que me sentía como en casa con muchos conocidos y muchos más que conocí allí como Jorge Patané, Ronaldo Maciel, Jorge Vuoto Dowling y el inolvidable Martín Saubidet. Dos frases quedaron en mi memoria del Dr. La Ruffa: su permanente queja por la "obsolescencia de los materiales" y la sugerencia imperativa antes de la inminente acción quirúrgica "colgate las pinzas y estate atento...!” pasaron 27 años y todavía las recuerdo con una sonrisa.
Por fin, la última rotación, en el primer semestre del ’84 vamos al Hospital Pirovano, con el Dr. Raúl Fernández Humble como Jefe y el Dr. Jorge Herrera como instructor de lujo.
La rotación de cirugía estética fue, tal vez, la que más disfruté. Era la sub-especialización que había elegido y ya desde el comienzo del curso tuve la oportunidad de trabajar por las tardes con “Pepe” Robles, primero en su consultorio de la calle La Pampa y luego, siendo testigo y modesto colaborador del proyecto, en su clínica de Virrey del Pino, donde nos mudamos en el frío invierno de 1983.
Al año siguiente de finalizado el curso recibí mi título de especialista en la reunión solemne de la SACPER en la AMA, junto con José Soria y Jorge Rodríguez.
Una nueva etapa comienza.
Creo que la formación que adquirimos en el Curso fue fundamental en muchos sentidos, principalmente porque nos dio una base sobre la cual pudimos evaluar cada nueva opción técnica que se nos presentase. Desde una etapa muy temprana en nuestra formación nos permitió conocer y adaptarnos a la modalidad de trabajo de una variedad de Servicios, poniéndonos en contacto directo con jefes e instructores, profesionales dedicados durante años a la especialidad, que nos mostraron su manera de hacer las cosas, muchas de ellas las hemos adoptado, otras la hemos ido cambiando en la medida que hemos crecido en la especialidad.
Después de concluir el curso de especialización y ya con mi título habilitante en mano pasé cinco inolvidables años más al lado de “Pepe” Robles, a quien considero mi maestro y del cual guardo los mejores recuerdos para siempre. Durante los años a su lado trabajamos desarrollando algunos temas de la especialidad entre los que considero como fundamentales: el desarrollo de la técnica del aumento glúteo sub-muscular, que se emplea actualmente en todo el mundo; el tratamiento del SMAS en el lifting facial; el desarrollo de la lipoescultura ultrasónica, la cual comenzamos con el viejo equipo de Zocchi, llegando al desarrollo propio de la cánula aspirativa ultrasónica; la técnica de marcación dinámica de la mama, que utilizamos todos sus discípulos hoy en día; la técnica de expansión intraoperatoria rápida y tantas otras ideas, que fueron llevadas a la práctica con mayor o menor trascendencia.
Actualmente desarrollo mi actividad en mi San Isidro natal, compartiendo horas de quirófano con colegas y amigos. Casualmente, o no, un par de ellos son también egresados del mismo curso de especialización, ellos son los Dres. Gustavo Polisky y Ángel Appiani, que se formaron en distintas épocas del Curso, y con quienes en distendidas charlas de quirófano hemos revivido anécdotas y experiencias de tres distintas promociones de la larga y fructífera trayectoria de este Curso.
Dirección del autor:
Blanco Encalada 197 – Of. 60
(1642) San Isidro – Pcia. Buenos Aires
4735-2280
[email protected]
Promoción 1984 - Curso Superior de Especialización en Cirugía Plástica.
Miembro Titular de la Sociedad de Cirugía Plástica de Buenos Aires.
Médico Cirujano Plástico – Sanatorio San Lucas (San Isidro- Pcia. Bs. As. ).
Ante la iniciativa de narrar la historia del Curso Superior Trienal a través de sus egresados y con el fin de publicarlas en la Revista de la Sociedad Argentina de Cirugía Plástica, relato esta experiencia que me vinculara a un grupo de colegas que encontré en este Curso de la AMA, que constituyó un lugar de excelencia para formarme como especialista.
Los comienzos y una influencia fundamental.
Me recibí apenas a 10 días de cumplir 26 años, en la UBA, dando como última materia Urología en el Hospital de Clínicas, una linda materia para recibirse, por suerte fue casi un trámite. Al día siguiente, estaba haciendo mi primera guardia de médico general en una clínica de San Fernando, donde continué trabajando por casi 2 años más.
En Febrero del ´79, recibí mi titulo de médico, de manos del Prof. Dr. Alberto Houssay.
Aquí me permito retrotraerme a años anteriores a recibirme. En aquella época, existía todavía el “Practicantado”, actividad asistencial desarrollada por estudiantes de medicina después de haber aprobado Medicina I y II. Fue por el año ´76 que, a través de una médica ginecóloga amiga, me presenté a la guardia de los días lunes de la Asistencia Pública de San Isidro, un centro de emergencias con mucha actividad por entonces, fui presentado al cirujano Jefe de Guardia, que resultó ser nada más y nada menos que el Dr. José "Pepe" Robles que en esa época todavía alternaba la especialidad con la actividad hospitalaria. De más está decir que desde ahí en adelante mis pasos hacia la elección de la cirugía plástica como la especialidad que iba a desarrollar en el futuro fueron mucho más sencillos y seguros. Ya desde ese entonces, tuve el placer de asistirlo en las cirugías de urgencia durante las guardias y visitarlo con frecuencia en su quirófano los días en que operaba.
Con el claro objetivo de hacer la especialización en el Curso Trienal de la AMA, me presenté en el servicio de Cirugía General del Hospital de San Isidro cuyo jefe, en esa época era el Dr. Jorge Bodor, quien me aceptó para realizar los 2 años de concurrencia en cirugía general que el curso de especialización exigía como condición de ingreso en ese momento. Luego de finalizar el curso volví al hospital al sector de Cirugía Plástica junto a los Dres. Nahuel García Iturralde y Enrique Vitale permaneciendo durante varios años más, además de asociarnos en la práctica privada.
Comenzamos el Curso.
Ingresé al Curso en Julio del ´81 después de una evaluación de antecedentes de los postulantes. En esa época, el Director era el Dr. Paulino Morales y el Secretario el Dr. Guillermo Flaherty. Ingresaban cuatro postulantes por año y rotábamos dos por hospital intercambiando las rotaciones cada semestre.
Mi primera rotación fue en el Hospital de Quemados y mi compañero de entonces, cuyo nombre no recuerdo, dejó el curso dos o tres meses después de comenzarlo para dedicarse a la Psiquiatría. Desde entonces, mis compañeros de todas las mañanas fueron los alumnos de la Carrera de la Universidad del Salvador que hacían las mismas rotaciones, Tomás Brosto, con quien he mantenido una gran amistad durante todos estos años y el fallecido Carlos Novick. En la otra rotación, estaban José Soria y Jorge Rodríguez, con quien nos cruzábamos ocasionalmente y obviamente, al momento de rendir las evaluaciones finales de la rotación. Si mal no recuerdo en ese momento era el jefe de Servicio del Hospital de Quemados el Dr. Víctor Nacif Cabrera y como instructores recuerdo a los Dres. Hugo Bertone, María Corujo, Jorge Parcansky y Mario García Pintor.
En el primer semestre del ´82, comenzamos a rotar por el Hospital de Niños “Ricardo Gutiérrez”, cuyo jefe era el Dr. Oscar Mallo, allí me sentí muy bien guiado gracias a la presencia permanente de los Dres. Pedro Dogliotti y Susana Ruiz, quienes me enseñaron primero y me asistieron luego en diversas cirugías reconstructivas infantiles.
Ese invierno empezó el largo viaje de San Isidro a Lanús, con escala en Parque Chacabuco donde pasaba a buscar a Carlos Novick y seguíamos viaje hacia el Servicio del maestro Flavio Sturla, en el Hospital Aráoz Alfaro, donde casi siempre pasábamos unas horas en la morgue "disfrutando" de algún "Juanito" con una buenas medialunas para el desayuno e inolvidables enseñanzas en cirugía maxilo-facial, que recordamos de esos lejanos tiempos.
Luego fuimos a San Martín, al Hospital Mariano Castex (actual Eva Perón), a realizar la rotación de cirugía de mano y miembros, con el Dr. Néstor Maquieira, con quien tuvimos el placer de compartir horas de cirugía y ateneos. En esa época, si mal no recuerdo, Héctor Lanza era el Jefe de Residentes.
La rotación de cirugía oncológica la realizamos en el Hospital Fernández, cuyo jefe era el Dr. Héctor La Ruffa. El Fernández fue mi Unidad Hospitalaria así que me sentía como en casa con muchos conocidos y muchos más que conocí allí como Jorge Patané, Ronaldo Maciel, Jorge Vuoto Dowling y el inolvidable Martín Saubidet. Dos frases quedaron en mi memoria del Dr. La Ruffa: su permanente queja por la "obsolescencia de los materiales" y la sugerencia imperativa antes de la inminente acción quirúrgica "colgate las pinzas y estate atento...!” pasaron 27 años y todavía las recuerdo con una sonrisa.
Por fin, la última rotación, en el primer semestre del ’84 vamos al Hospital Pirovano, con el Dr. Raúl Fernández Humble como Jefe y el Dr. Jorge Herrera como instructor de lujo.
La rotación de cirugía estética fue, tal vez, la que más disfruté. Era la sub-especialización que había elegido y ya desde el comienzo del curso tuve la oportunidad de trabajar por las tardes con “Pepe” Robles, primero en su consultorio de la calle La Pampa y luego, siendo testigo y modesto colaborador del proyecto, en su clínica de Virrey del Pino, donde nos mudamos en el frío invierno de 1983.
Al año siguiente de finalizado el curso recibí mi título de especialista en la reunión solemne de la SACPER en la AMA, junto con José Soria y Jorge Rodríguez.
Una nueva etapa comienza.
Creo que la formación que adquirimos en el Curso fue fundamental en muchos sentidos, principalmente porque nos dio una base sobre la cual pudimos evaluar cada nueva opción técnica que se nos presentase. Desde una etapa muy temprana en nuestra formación nos permitió conocer y adaptarnos a la modalidad de trabajo de una variedad de Servicios, poniéndonos en contacto directo con jefes e instructores, profesionales dedicados durante años a la especialidad, que nos mostraron su manera de hacer las cosas, muchas de ellas las hemos adoptado, otras la hemos ido cambiando en la medida que hemos crecido en la especialidad.
Después de concluir el curso de especialización y ya con mi título habilitante en mano pasé cinco inolvidables años más al lado de “Pepe” Robles, a quien considero mi maestro y del cual guardo los mejores recuerdos para siempre. Durante los años a su lado trabajamos desarrollando algunos temas de la especialidad entre los que considero como fundamentales: el desarrollo de la técnica del aumento glúteo sub-muscular, que se emplea actualmente en todo el mundo; el tratamiento del SMAS en el lifting facial; el desarrollo de la lipoescultura ultrasónica, la cual comenzamos con el viejo equipo de Zocchi, llegando al desarrollo propio de la cánula aspirativa ultrasónica; la técnica de marcación dinámica de la mama, que utilizamos todos sus discípulos hoy en día; la técnica de expansión intraoperatoria rápida y tantas otras ideas, que fueron llevadas a la práctica con mayor o menor trascendencia.
Actualmente desarrollo mi actividad en mi San Isidro natal, compartiendo horas de quirófano con colegas y amigos. Casualmente, o no, un par de ellos son también egresados del mismo curso de especialización, ellos son los Dres. Gustavo Polisky y Ángel Appiani, que se formaron en distintas épocas del Curso, y con quienes en distendidas charlas de quirófano hemos revivido anécdotas y experiencias de tres distintas promociones de la larga y fructífera trayectoria de este Curso.
Dirección del autor:
Blanco Encalada 197 – Of. 60
(1642) San Isidro – Pcia. Buenos Aires
4735-2280
[email protected]
09-04-85. El
Dr. Juan Carlos Tagliapietra recibiendo el diploma de egresado del Curso
Superior de Especialización de Cirugía Plástica de manos del Dr. Manuel Viñal,
miembro de la Comisión Directiva
de la SACPER.